Marruecos es un lugar increíble para viajar. Al llegar a este país, es imposible no notar un fuerte cambio cultural, por mucho que pensemos que Marruecos está bastante occidentalizado; y es que el paisaje, los olores, los colores, vestimentas, comida y tradiciones, nos recordarán que estamos muy lejos de casa.
Las grandes ciudades como Casablanca o Marrakech tienen muchísimo para mostrarnos, pero sin duda alguna, el encanto de Marruecos lo encontramos en sus pueblos; y es que es posible encontrar rincones tan maravillosos como Chauen o Fez, no siendo ni de lejos los únicos lugares con encanto de este país.
Pueblos y ciudades de Marruecos con encanto
Descartando los dos pueblos ya nombrados, quizá los más conocidos a la hora de realizar una visita a Marruecos, queremos acercaros los que, bajo nuestro punto de vista, podrían ser los cinco pueblos más bonitos de Marruecos.
Comenzamos con Ait Ben Haddou. Se trata de una ciudad fortificada ubicada en la provincia de Uarzazate. Sus grandes muros de adobe nos sorprenderán desde la carretera, dando la impresión de que estamos entrando en un escenario de película, sensación que no nos engañará; y es que esta ciudad, además de ser considerada Patrimonio de la Humanidad, ha sido el escenario en el que se han rodado muchas películas a lo largo de la historia. Así, títulos como Lawrence de Arabia, la Joya del Nilo, Jesús de Nazareth o más actuales como Prince of Persia, Babel o el reino de los cielos y Gladiator, han sido rodadas justo aquí en algunas de sus escenas.
Moulay Idriss es otro de esos pueblos que nos enamorarán. Está ubicado a unos 25 km de Mequinez, en lo alto de una roca y dominando un amplio valle.
Se trata de una ciudad santa más que acostumbrada a las peregrinaciones y las visitas de los curiosos turistas; y es que cuenta con un reclamo bastante importante, el santuario de la dinastía Idris, o lo que es lo mismo, los primeros colonizadores musulmanes de Marruecos. Es cierto que no podremos entrar a esta mezquita, pero el trazado del pueblo, sus sinuosas calles y sus bonitos colores serán motivos más que suficientes para pasear por aquí.
Camino a Tineghir
Otro pueblo a destacar es Tineghir. Está situado a los pies del Atlas, un enclave lleno de belleza. Fue construido en un oasis, así, poco a poco fueron proliferando las casas aprovechando esta zona verde entre tanta roca y paisaje de montaña. Lo cierto es que la diferencia entre el paisaje es realmente llamativa, encontrando de vez en cuando palmeras que se levantan desafiando la aridez de la zona.
Essaouira es otro de los lugares favoritos a la hora de viajar a Marruecos junto con Fez o Chauen, motivos no faltan; y es que estamos ante una ciudad costera con una belleza excepcional. Bañada por el Atlántico, cuenta con rincones tan maravillosos como su medina, la cual ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Murallas, preciosas costas llenas de gaviotas y fachadas blancas harán que nuestra estancia en Essaouira sea una experiencia inolvidable. Pasear por sus calles, la mejor forma de conocerla, sin olvidarnos de que aquí, no probar un plato a base de pescado recién sacado del mar sería pecado.
Artesania tipica en Chauen
Finalmente nos acercamos a Asilah, un lugar con un embrujo realmente mágico. Es también un lugar de costa, ubicado a tan sólo 46 km al sur de Tánger y a unos 110 km de Ceuta.
Podemos pasear por sus calles, introduciéndonos en las entrañas de la urbe sin coger mapa alguno, y es que ya se sabe que aquí, en Marruecos, al entrar en una ciudad, este tipo de moderneces de poco nos sirve.
También podemos pasear bordeando la ciudad, pegados al mar, divisando los restos de una muralla que nos hablan de una Asilah con historia, un lugar perfecto para perderse.
Sin duda alguna estos son algunos de los pueblos más bonitos. Lugares que bien merecen la pena figurar en nuestra lista de próximas visitas aquí en Marruecos. Evidentemente no son los únicos, pero puede ser un buen comienzo para adentrarnos en los paisajes de este país.