Aquí tenemos una demostración de que el arte en cuanto a expresión y manifestación humana no conoce límites ni circuitos establecidos previamente. Nos encontramos en Chile, más concretamente en Antofagasta, en el desierto de Atacama. Se encuentra ubicado hacia el sur de este país a tan sólo 75 kilómetros de Antofagasta. Frente a la dureza desértica, nos recibe una mano que se alza desde la superficie: la Mano del Desierto de Antofagasta.
La Mano del Desierto de Antofagasta
La Mano del Desierto, obra de Mario Irarrázabal
Llamada “La Mano del Desierto” esta impactante obra fue realizada por el chileno Mario Irarrázabal. Forma parte de este espacio desde el 28 de marzo del año 1.992. Se encuentra semienterrada y cuenta con 11 metros de altura a 1.100 metros sobre el nivel del mar.
El ocurrente artista posee una serie de obras que representan una mano. Ellas se encuentran ubicadas en destinos muy diferentes entre sí. Podemos toparnos con ellas en el Parque Juan Carlos I en Madrid, en la playa La Brava, en Punta del Este dentro de Uruguay y también en Venecia. Sin embargo, todos aseguran que no hay obra que se asemeje o tolere comparación con “La Mano del Desierto”.
La estructura de “La Mano del Desierto” se compone de hierro y cemento. Gracias al material de construcción esta escultura puede sobrevivir al paso del tiempo y los duros cambios climáticos. Y sobretodo a la sequedad del desierto.
Significado de La Mano del Desierto
Resulta sobrecogedor tan imponente obra ya que el vacío que reina en este lugar la carga de significación. Una mano que surge de la superficie nos lleva a pensar en los antepasados. En aquellas construcciones, legados, restos de trabajos, costumbres y tradiciones de quienes supieron habitar estas tierras con anterioridad. Algunos opinan que es la ciudad despidiéndose del viajero. Otros prefieren pensar que es un monumento que representa a las víctimas de la injusticia y la tortura durante la dictadura militar de 1973-1990.
Destino de turismo astronómico
La Mano del Desierto junto con el propio desierto de Atacama, tiene otorgado el el sello como Destino Turístico Starlight desde 2014. Y es que está reconocido como un lugar ideal para observar las estrellas. Así cada año atrae a más enamorados del firmamento donde pueden contemplar la Vía Láctea, la Cruz del Sur y las Nubes de Magallanes. Al igual que una gran cantidad de estrellas brillantes, como Antares, Altair y Alfa Centauri, entre otras.
Además de captar unas impresionantes imágenes de esta escultura apuntando al cielo oscuro y las estrellas.
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