Un profesor de la Universidad de Colonia, Alemania, ha descubierto que se maneja erróneamente el dato de la longitud del Rin. Desde hace un siglo consta que mide 1.320 kilómetros. Este profesor ha logrado seguir el curso del río desde sus nacientes en Suiza hasta su desembocadura en Holanda. Y ha constatado que son 1.230 kilómetros: 90 menos de lo pensado.
El río Rin es una de las vías navegables más importantes del mundo. Casi 900 km de su recorrido son navegables y ha sido vía de comunicación desde tiempos inmemoriales.
Es, además una de las rutas de cruceros fluviales más frecuentada por viajeros del mundo entero.
Un recorrido por el río Rin
Nace en el Cantón de los Grisones, en Suiza, cerca de Davos y St.Moritz. Pasa por el lago de Constanza para seguir su curso hacia Basilea. Convirtiéndose en uno de los imprescindibles qué ver en Basilea en 2 días.
A partir de allí, encontramos el hermoso recorrido conocido como “Selva Negra”. Se dirige y es frontera entre Francia y Alemania pasando por Estrasburgo, Karlsruhe, Mannheim, Wiesbaden, Coblenza.
En su itinerario el río Rin regala vistas impresionantes de gargantas, puertos fluviales, pequeños y pintorescos pueblos, iglesias y castillos asomados a sus aguas.
Más adelante se interna en el corazón industrial del Ruhr antes de dirigirse a los Países Bajos.
Allí se divide antes de desembocar en el Mar del Norte, formando un amplísimo delta junto con el río Mosa.
Ciudades históricas y bellísimas como las mencionadas y puertos de gran importancia como Basilea o Rotterdam, hacen del Rin una vía muy atractiva para conocer y recorrer. Puede hacerse también por los caminos paralelos, tanto en coche como en bicicleta.
Nuestro consejo de viaje; un recorrido ideal sería, por ejemplo, reservando un hotel en Estrasburgo, recorrer el curso hacia el sur y hacia el norte visitando pueblos y ciudades a su paso.
Una idea que, aunque ahora tenga 90 kilómetros menos de lo esperado, nos reservará más de una agradable sorpresa.
Foto/ Flickr de alcebal2002
Foto/ Flickr de ed4553