Hay veces que nos cuesta elegir. Hay otras que lo tenemos completamente claro. Si no has conseguido aún decidirte por el destino de tus vacaciones. Si eres un indeciso y no te decantas por el mar o por la montaña ¿por qué no tenerlo todo junto? Alicante es la solución. Te mostramos algunos de los tesoros mejor guardados de esta provincia, tanto en su parte interior como en la costa.
¿Te apetece perderte por parajes verdes? No lo dudes, la Sierra de Aitana es una de esas opciones que merecen la pena. Se trata de un conjunto montañoso que forma parte del Sistema Bético. Una sierra plagada de rutas senderistas salpicadas por fuentes, que todo sea dicho, cuentan con una calidad en sus aguas excepcional (Partagat, fuente de L´Arbre, Font de la Forata etc).
Su punto más alto es el pico de Aitana, con unos 1.558 msnm, que es, a su vez, el punto más alto de toda la provincia. Muchas son las rutas que nos acercarán hasta este lugar, pudiendo practicar otros deportes como por ejemplo la escalada.
Los paisajes son abrumadoramente bellos. Pero, además, no podemos olvidarnos de que la Sierra Aitana es el hogar de numerosas especies, como el águila perdicera, halcones, gavilanes o búhos. Despiértate pronto y aprovecha el día para conocer sus cimas, sus barrancos y sus valles, en los que, además, también se pueden encontrar jabalíes, ardillas, lirones, comadrejas y zorros. Todo un documental en vivo de la flora y fauna más típica del Levante.
Alicante, Castillo de Santa Bárbara
Alojarnos en esta zona no será complicado, pues lo cierto es que hay muchos pueblecitos encantadores cerca de los inicios de las rutas de la sierra. No obstante, si queremos ir a por lo seguro, es mejor optar por ciudades un poco más grandes, como por ejemplo Alcoy.
Está a unos 40 minutos de la sierra y se trata de la capital de la comarca de la Hoya de Alcoy, por lo que es una urbe grande llena de servicios. Además, lo cierto es que esta ciudad cuenta con un sinfín de visitas extra como el Yacimiento arqueológico de la Serreta, el de El Puig, los restos arqueológicos de la Mola de Serelles o El Castellar y el Salt así como el Castillo de Barchell, entre muchísimos otros.
Alojamiento no faltará, pues cuenta con una oferta amplia. Podemos destacar, por ejemplo, el Hotel Sercotel Ciutat de Alcoi, un establecimiento de 4 estrellas inaugurado en 2005. Con sala de conferencias, Wifi en todo el hotel, cafetería, bar y restaurante, se perfila como una de las opciones más interesantes en la ciudad, sin ser evidentemente la única en cuanto a calidad se refiere.
Eres más de playa, no lo puedes remediar. A ti, los veranos, te gusta tomarlos con doble de agua y arena. Pues bien, Alicante también te ofrece eso y más; y es que no podemos olvidarnos de que la Costa Blanca es uno de los principales focos turísticos de sol y playa en España.
Las opciones en la Costa Blanca son infinitas, pues cuenta con muchas localidades famosas por la calidad de sus playas. No obstante, nos gustaría destacar Javea. Este núcleo urbano está muy próximo a otros puntos costeros interesantes como Denia, y es, además, el lugar favorito de los valencianos a la hora de veranear en sus propias costas, por algo será.
Playas puedes encontrarlas de todo tipo. Desde grandes y extensas con todos los servicios, hasta bonitas calas como la Granadella, que es, sin duda alguna, uno de los pequeños tesoros de Jávea. Compuesta principalmente por roca y grava, permite que los bañistas, además de disfrutar del sol y el mar, puedan practicar buceo de superficie maravillándose con los tesoros del mar. Es una playa semiurbana de unos 200 metros de longitud y está completamente rodeada de pinos.
En cuanto al alojamiento, en Javea puedes encontrar lugares tan fantásticos como el Hotel Parador de Javea, un establecimiento de 4 estrellas, pequeño y acogedor. Con tan sólo 70 habitaciones, cuenta con espacios perfectamente equipados para el huésped, bar, cafetería y restaurante, entre otros.
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