Reikiavik, capital de Islandia, es una ciudad situada al sur de la bahía Faxflói, una zona en la que los géiseres abundan por doquier. Es precisamente por este motivo que la ciudad terminó llamándose de esta extraña forma. Un nombre impronunciable que significa algo así como “bahía humeante”.
Podemos decir de esta ciudad que es tranquila y acogedora. Podemos decir, también, que es la ciudad más septentrional del mundo. Ello se traduce en inviernos poco luminosos, con tan sólo cuatro horas de luz solar, así como veranos de días interminables, en el que el sol permanece en el cielo casi la mayor parte de las noches.
Si bien es cierto que se trata de una ciudad más bien pequeña, en Reikiavik podremos encontrar un gran número de lugares interesantes. Así, destaca por ejemplo el Parlamento, construido en 1881 o la casa de Gobierno, levantada en el siglo XVIII. Ambos edificios están en el corazón de la ciudad, en la parte con más historia de la misma, y se encuentran acompañados de lugares como la Biblioteca Central o el Teatro Nacional, también interesantes para ver.
Asimismo, situado también de forma céntrica, encontramos el lago Tjörnin. Este lugar, concretamente sus márgenes, han ido dando forma al parque más frecuentado de toda la ciudad, tanto por los locales como los turistas.
A orillas de este gran lago, concretamente en la orilla norte, encontramos uno de los edificios más destacados de la ciudad. Se trata del nuevo Radhus o Ayuntamiento de la ciudad, el cual destaca por su original estructura. Se construyó como un palacio flotante, y lo cierto es que presenta una imagen realmente interesante en mitad de este hermoso lago.
Cerca del Ayuntamiento, encontramos uno de los edificios más antiguos de la ciudad, el Stjórnarrádid. Se trata de un palacete con una enorme fachada blanca. Fue construido en el siglo XVIII, y en la actualidad está ocupado por oficinas del gobierno.
Desde el punto de vista religioso, encontraremos varios templos que merecen la pena ser visitados. Por un lado la Catedral, que si bien no es la iglesia más grande de la ciudad ni de Islandia, sí es uno de los edificios más antiguos de la ciudad, construida allá por 1787 y sede actual del único obispo de la Iglesia de Islandia.
Sin embargo, el templo más famoso de Reikiavik es la nueva iglesia o Hallgrímskirkja. Es una de las estructuras más llamativas de la ciudad, debido principalmente a forma, pues parece una montaña de lava basáltica. Además, al subir a su torre, de unos 75 metros de altitud, disfrutaremos de unas vistas espectaculares sobre la ciudad y sus alrededores.
Si nos apetece visitar un museo lleno de historia, no debemos perdernos el Museo Folclórico de Arbaer, situado al este de la ciudad. Este lugar cuenta, entre otras muchas cosas, con viejas casas de la ciudad, reconstruidas en su estilo original. Hablamos pues de un museo etnográfico en el que también se presenta una iglesia rural tradicional, así como una granja, ambas construidas con turba y pasto.
En cuanto a la oferta hotelera, Reikiavik cuenta con un sinfín de opciones a la hora de alojarnos. Podemos destacar, por ejemplo, el Hotel Cabin, un modesto 2 estrellas situado a tiro de piedra del centro de la ciudad, por lo que las atracciones más destacadas estarán a pocos pasos.
El hotel cuenta con unas vistas espectaculares frente al mar, pudiendo divisar algunos de los glaciares. Aunque sus habitaciones no son enormes, cuentan con todo tipo de servicios como caja fuerte, cunas, mesa de trabajo, parabólica, WIFI, radio o teléfono y TV.
Asimismo, también cuenta con aparcamiento gratuito para autocares o turismos, ascensor, cambio de divisa, salones sociales y salón de TV.
Para aquellos que busquen un hotel lleno de lujos, podemos destacar el Radisson Blu Saga. Está a tan sólo 10 minutos del centro, por lo que tampoco quedará muy lejos de las principales atracciones.
Las habitaciones son amplias y están decoradas con muchísimo gusto. Cuentan con caja fuerte, canal plus, cunas, minibar, parabólica, TV, Radio, Secador, teléfono y WiFi.
Además, el hotel está dotado de instalaciones como baños turcos, balneario, gimnasio, jacuzzi, peluquería, piscina cubierta, sauna, tiendas o salones sociales, entre otros.
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Fotos vía: Daquellamanera