Berlín es una de las ciudades más turísticas de Europa. Un lugar lleno de historia, sin duda. Ciudad mundial y centro cultural, artístico y económico de primer nivel además de una de las urbes más influyentes en el ámbito político en nuestros días. Repleta de grandes avenidas, edificios y con mil caras diferentes, conocerla puede ser una gran experiencia y, aunque hay mucho para ver, en un par de días podrías realizar las visitas más importantes. Esas que podemos marcar como imprescindibles.
¿Qué hay que visitar en Berlín?
Es imperdonable ir a Berlín y no visitar la Puerta de Brandeburgo. Es un monumento situado a pocos metros del derrumbado muro de Berlín, en la que se conocía como tierra de nadie, que se situaba entre el muro, los cuarteles y las torres de vigilancia. Hoy es el símbolo absoluto de la reunificación del país.
Se ubica en la Pariser Platz, al final de la avenida Unter den Linden, que es la calle más importante de la ciudad. Un buen destino para comenzar, pues así, podrás visitar también otros edificios importantes como el de la Nueva Guardia.
Tampoco sería buena idea irse de Berlín sin ver el Muro de Berlín, o mejor dicho lo que queda del mismo. No sólo dividió la ciudad sino también el mundo. Por tanto, su valor simbólico es enorme. En zonas como Mühlenstraße puedes ver un tramo de más de un kilómetro, pero… ¿lo mejor de todo? Que los restos de este muro están plagados de arte; y es que la parte de la East Side Gallery, es considerada como una de las galerías de arte al aire libre más grandes de todo el mundo.
Imprescindible es, también, el Checkpoint Charlie. Fue el paso más famoso del Muro de Berlín durante la Guerra Fría. Sólo podía cruzarlo personal autorizado. En caso contrario, los guardias tenían orden directa de disparar a matar.
Berlín cuenta con plazas muy importantes, pero, sin lugar a dudas, Alexander Platz es una de las más históricas e interesantes. Es francamente grande. Pertenecía a la parte soviética y el edificio más destacado de ella es la Torre de Televisión de 368 metros de altura. Si puedes subir, sube, pues desde arriba puedes apreciar una de las panorámicas más interesantes de Berlín.
En otro orden de cosas, esta plaza también cuenta con la Fuente de la Amistad entre los Pueblos, la Galería Kaufhof o el Reloj de las Horas del Mundo.
También hay que destacar la Postdamer Platz. Está en el corazón del Berlín Occidental, y en 1920 fue uno de los lugares más populares de toda Europa. Tras la caída del muro, se convirtió en un ansiado espacio de construcción. A día de hoy, entre otros, podrás ver modernos centros comerciales y grandes rascacielos. Es además una de las mejores zonas ahora mismo para buscar alojamiento en Berlín pues es un lugar tranquilo y bastante seguro, y no mal situado para ver la capital alemana.
El templo más importante de la ciudad es la Catedral de Berlín, conocida como Berliner Dom. Está muy cerca del Río Spree y de la conocida Isla de los Museos. Con un estilo neoclásico que impacta nada más divisarla, hay que destacar que durante la Segunda Guerra Mundial quedó bastante deteriorada.
Hasta 1978 no comenzaron los trabajos de reconstrucción, terminando, finalmente, en 1993. El diseño actual cuenta con una parte superior mucho más visible, pero de menor altura que la original. Aun así, es una maravilla arquitectónica.
En el centro de Berlín está también la Kaiser-Wilhelm-Gedächtniskirche. Se trata de una iglesia que sufrió muchísimo los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Lo cierto es que tan sólo sobrevivió una gran torre, la cual ha sido conservada, sin restaurar, como un ejemplo de las consecuencias catastróficas de la guerra.
Memorial del Holocausto
El Monumento al Holocausto es uno de esos sitios que te hacen pensar. Un lugar sobrecogedor. Se levantó en recuerdo a los judíos asesinados por los nazis y está formado por una gran zona cuadriculada de pasillos en los que se alzan bloques de hormigón de diferente tamaño y altura. También hay un área en la que se pueden leer los nombres y fechas de nacimiento y muerte de las víctimas del holocausto.
La Isla de los Museos fue un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Está ubicada en la parte norte de la Isla Spree, un distrito dedicado al arte y las antigüedades, ideal para los que quieren terminar su visita con un buen museo. Puedes visitar desde el Altes Museoum (Museo Antiguo), el Lustgarten o el Neues Museum (Museo Nuevo), en el que se ubica el busto de la reina Nefertiti. También la Antigua Galería Nacional de Berlín, el Museo Pérgamo Berlín o el Museo Bode. No obstante, no te olvides que Berlín cuenta con 365 museos, y no todos están aquí.
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