El Rijksmusem de Amsterdam abre de nuevo sus puertas
Desde el pasado 14 de abril el arte en Holanda ha vuelto a sonreír. Tras diez años inmerso en una profunda transformación, el Rijksmuseum de Amsterdam, una de las pinacotecas más grandes e importantes del mundo, ha reabierto sus puertas. Por sus más de ochenta salas fluyen como un río diáfano ocho siglos de arte en la historia de los Países Bajos.
Algunas de las obras más universales de artistas como Rembrandt, Vermeer o Van Gogh, por poner solo tres ejemplos, podrán ser degustadas por los dos millones de personas que cada año rinden visita a este museo, considerado la catedral holandesa del arte. Ocho mil obras que han vuelto a su lugar de origen, las paredes de este recinto que en el día de su inauguración ya había vendido más de 75.000 entradas, tanto en taquilla como a través de internet.
El origen de este enorme museo nacional holandés hay que buscarlo en 1885, año de su inauguración oficial. La primera de las colecciones parte del rey Luis Napoleón en 1808, aquella que durante varias décadas estuvo colgada en los muros del Palacio Real. Sería en 1865 cuando el arquitecto P.J.H Cuypers diseñara el edificio actual, con la idea que aún se mantiene: imposible de poderlo conocer en una sola visita.
Curiosamente la obra que ingenió Cuypers fue muy criticada en su momento por los ciudadanos de Amsterdam (como suele ocurrir con los grandes edificios que quedan para la posteridad, caso de la Torre Eiffel), especialmente los de signo protestante. No veían con buenos ojos ni los tejados neogóticos ni la profusa decoración de la fachada. Tanto es así que el rey Guillermo III ni siquiera quiso poner los pies en el interior del museo.
Una gran fiesta de fuegos artificiales frente a la explanada del museo sirvió de preámbulo a la reapertura. Miles de personas se congregaron a sus puertas para ver el momento en el que la reina Beatriz, con una llave de oro, inauguraba el edificio completamente renovado. En el interior esperaban las mejores obras del arte holandés: pinturas, esculturas, muebles, objetos de plata y cerámica, etc…
Desde el pasado año 2003 tan solo permanecía abierta el ala Philips, donde podían verse algunas de las mejores piezas del museo. Se estimaba que las obras de renovación hubieran concluido hace más de dos años, pero todo se ha demorado un poco más. La espera seguro que habrá merecido la pena.
La gran joya de la pinacoteca es el cuadro de La Ronda de Noche, de Rembrandt. Realizado en 1642, cuenta la tradición que fue la obra que salvó de la miseria al artista nacido en Leiden. Los expertos aseguran que fue un retrato atrevido para su época, ya que los guardias que aparecen de pie y dando órdenes solían ser pintados sentados y con actitud sobria. Posiblemente los milicianos que encargaron el cuadro no quedaran demasiado contentos.
La nueva apertura del Rijksmuseum ha coincidido con el último acto oficial llevado a cabo por la reina Beatriz de Holanda. El próximo 30 de abril abdicará el trono en su hijo Guillermo Alejandro, precisamente el mismo día en el que toda Holanda celebra el Día de la Reina, una de sus fiestas más sonadas.
– Información adicional
- Dirección: Museumplein / Museumstraat 1, 1071 CJ Amsterdam
- Horarios: El Rijksmuseum de Amsterdam abre todos los días de 09.00 a 17.00 horas
- Precios: La entrada cuesta 15 euros para los adultos y gratis para los menores de 18 años (se puede comprar en taquilla, aunque lo más recomendable es reservarla a través de internet en la web del museo para evitar colas)
– Cómo llegar
Desde el centro de Amsterdam se puede llegar fácilmente a pie, ya que el museo está a unos quince minutos. También se pueden tomar diferentes tranvías (2, 5, 10, 7 o 12) o autobuses urbanos que tienen paradas en los alrededores.