Las Fallas de Valencia
Ya estamos en el mes de marzo y huele a las Fallas de Valencia. Si todavía no las has vivido en persona, tienes que poner remedio a esto. Porque esta fiesta del fuego es una auténtica maravilla.
En este artículo queremos contarte su historia y curiosidades para que te animes a organizar tu viaje.
Historia de las Fallas de Valencia
La palabra valenciana “falla” viene del latín: facula, que significa “antorcha”. Originalmente eran antorchas que se ponían en lo alto de las torres de vigilancia en época romana.
Hay muchas teorías acerca del origen de las fallas. La más popular cuenta que los carpinteros de la época tenían como costumbre quemar trastos viejos en las puertas de los talleres la víspera de San José. Celebraban así la fiesta de su patrón y el fin del invierno. Con el paso del tiempo, no se puede confirmar al 100 %, añadieron figuras humanas de madera vestidas, que serían los primeros ninots.
En el siglo XIX todavía no eran consideradas una fiesta principal de la ciudad, pero cada vez se celebraba más y más la festividad de San José.
Empezaron a colocar unas tarimas de madera donde colocar diferentes ninots vestidos con ropa real, máscaras… ¡era un auténtico teatro con contenido puramente satírico!
La evolución de las Fallas de Valencia
Hubo unos años en el siglo XIX en que las autoridades se pusieron duras con la censura y las fallas. Al tener todas un tono muy satírico, fueron obligando a todas ellas a pasar un control previo.
Cuando eso pasó, se llegó a crear una “falla erótica”. Era uno de los monumentos que satirizaba las relaciones sexuales y maritales.
En aquella época aparecieron los llibrets. Eran panfletos donde se explicaba cada una de las fallas. Por las calles de la ciudad se veían niños vendiéndolos.
En 1901 el Ayuntamiento concedió el primer premio a una falla. Desde ese momento las fallas de Valencia empezaron a tener un componente artístico importante. Los talleres empezaron a contratar a artistas para la construcción de estos monumentos. A día de hoy algunos de ellos son falleros de profesión a tiempo completo.
Organización de las Fallas de Valencia
En las Fallas de Valencia encontramos muchas comisiones falleras. Cada comisión se encarga de una falla en concreto. Originalmente, eran vecinos del mismo barrio y se agrupaban por cercanía. Hoy en día eso ha cambiado y valencianos y forasteros forman parte de comisiones falleras por afinidad, amistad, etc.
Cada comisión fallera cuenta con un casal. Es el local donde se reúne la comisión para actividades y celebraciones. Normalmente, durante el resto del año, está abierto para los vecinos como lugar de reunión social.
La mascletà
Hay que reconocer que la mascletà no le gusta a todo el mundo. Quien es sensible al ruido, puede que no la disfrute, os vamos a ser sinceros.
Pero a los que las hemos vivido desde niños, se nos pone la piel de gallina en cuanto escuchamos “senyor pirotècnic, pot començar la mascletà”. Y se nos llegan a saltar las lágrimas con el sonido y el olor a pólvora.
La mascletà es una serie de fuertes explosivos (masclets) que no solo producen ruido. Tienen su ritmo. Van aumentando la intensidad y sonoridad a medida que avanza la mascletà, hasta llegar al conocido como “terremoto”, que es la parte final.
El sonido es ensordecedor, ¡una auténtica pasada! No suelen durar más de 10 minutos, pero son unos minutos intensos.
Del 1 al 19 de marzo puedes disfrutar de ellas a las 2 en punto de la tarde. Desde la 1 aproximadamente, la plaza del Ayuntamiento empieza a llenarse de personas que quieren tener la mejor ubicación.
En cuanto termina, la plaza entera estalla en aplausos y los más atrevidos van a buscar al pirotécnico para celebrar con él a hombros su triunfo.
Consejos: Si es tu primera mascletà, ponte en la zona de la fuente donde se nota menos el ruido. Si eres de los más valientes no temes al fuerte sonido, cerca del edificio de Correos alucinarás.
Otros actos de las Fallas de Valencia
La mascletà no es el único acto que no puedes perderte durante la semana de Fallas. Te contamos algunos momentos importantes:
1- La Crida:
Es el pregón donde la Fallera Mayor, desde las Torres de Serrano, da el pregón a las comisiones falleras, valencianos y visitantes. El alcalde le entrega las llaves de la ciudad y se dan por iniciadas oficialmente las Fallas.
2- La exposición del Ninot:
Se trata de un museo provisional con alrededor de 800 ninots, abierto al público durante varios días qué en la Ciudad de las Ciencias de Valencia. Cada comisión fallera presenta uno de sus ninots con la ilusión de que, mediante votación popular, uno sea elegido el mejor y se salve de ser quemado. Se denomina el “ninot indultat”.
Después de elegirlo, el resto de comisiones van a recoger los suyos para volver a colocarlos en la falla. Normalmente hacen este camino en grupo, con música y fiesta por la calle, de la mano de las falleras mayor e infantil de cada falla. ¡Lo importante es celebrar!
3- La Plantà:
Los primeros días de la semana grande, 14 y 15 de marzo, se erigen los monumentos falleros. La plantà debe realizarse antes de la mañana del 16, cuando pasa un jurado a calificarlas.
4- La Despertà:
Valencia es tierra de pirotecnia. Así que, si te alojas cerca de alguna falla, no te sorprendas si escuchas petardos de buena mañana. Todas las mañanas durante la semana de Fallas, los falleros despiertan al resto de vecinos con petardos, cosa que tiene su polémica porque no hace gracia a todo el mundo.
5- La Ofrenda de flores:
La Ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados, conocida como la “Geperudeta” (jorobadita, en castellano), tiene lugar los días 17 y 18 de marzo. Y una de las cosas curiosas y más bonitas de ver es que cada fallera ofrece un ramo de flores a la virgen; y con ellos se crea un inmenso manto que cubre todo el cuerpo de la figura.
6- Castillos de fuegos artificiales:
Del 15 al 19 de marzo, podemos ver desde la zona de la Alameda a las 00:00h estos castillos de fuegos. Siendo la noche del 18 al 19 de marzo la más importante, conocida como “La Nit del Foc”.
7- La Nit de la Cremà:
La noche del 19 de marzo las fallas llegan a su fin cuando son quemadas.
Trajes típicos de las Fallas de Valencia
Suponemos que todos los que nos estáis leyendo habéis visto en alguna ocasión el traje típico de fallera. Aunque nos pueda sorprender, en el siglo XVI era el traje de trabajo de las labradoras valencianas. La verdad es que muy cómodas no debían ir.
Pero con el paso del tiempo fue convirtiéndose en una vestimenta más elegante, reservada para ocasiones especiales.
Las telas que podemos ver estos días desfilar por las calles de Valencia son una auténtica maravilla.
En el pelo, las mujeres llevan un moño o tres. En este último caso, la fallera lleva un moño grande en la parte trasera y dos pequeños a los lados, llamados “rodetes”. Se adornan con peinetas y están inspirados en la Dama de Elche.
Aunque los trajes de mujer son más llamativos, no hay duda, los hombres tienen también sus trajes típicos, el saragüell y el traje de torrentí.
Podemos escribir mucho acerca de las Fallas de Valencia, pero la realidad es que hay que vivirlas. Os recomendamos que reservéis un hotel en Valencia y lo hagáis porque os va a merecer la pena.
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