Las mejores piscinas naturales de España
Con la llegada del calor, los fines de semana se convierten en la ocasión perfecta para escaparse y disfrutar de un poco de relax rodeado de agua. Los hay quienes disfrutan de la playa ¿pero qué pasa si eso de la arena no es lo tuyo? Tranquilo, hay soluciones. Quizá te seduzca más la idea de irte a una piscina, o mejor aún, una piscina natural.
En España encontramos un sinfín de opciones en cuanto a piscinas naturales se refiere. Lugares increíbles caracterizados por un entorno natural de gran belleza y agua, mucha agua, que al final es lo que importa para aplacar el calor.
En Gandesa, Tarragona, encontramos por ejemplo la Fontcalda. Se trata de un rincón encantador ubicado entre montañas junto al río Canaletes. Este balneario natural se nutre de una fuente de agua que sale a unos 38 grados y que está compuesta por cloruro y carbonato cálcico, sulfato de magnesio y cloruro sódico. Un buen lugar en el que disfrutar de un baño minero-medicinal. Además, en las proximidades de estas aguas encontramos un precioso santuario del siglo XIV, la mezcla perfecta entre descanso y visitas turísticas.
En Girona, concretamente en la comarca de La Garrotxa, nacen las pozas del Gorg Blau de Sant Aniol, unas pozas refrescantes que aliviarán el calor de los días más sofocantes. Lo más interesante es que para llegar podemos realizar una ruta de senderismo, algo que nos regalará un paisaje lleno de belleza con un oasis en el que refrescarnos al final de la jornada.
Gorg Blau de Sant Aniol – foto de Sisku
Uno de los paraísos más destacados en esto de las piscinas naturales lo encontramos en El Hierro. Se trata de El Charco Azul, y no es raro que nos suene, pues su imagen circula mucho por la red, siendo así uno de los lugares más bellos y ansiados por los turistas que van a esta isla. Esta piscina natural está emplazada frente al Océano, y en verdad se trata de dos. Dos piscinas naturales entre cuevas a las que podremos acceder después de andar unos 15 minutos.
En Ourense podemos visitar las piscinas naturales de Ourense, también conocidas como Caldas do Obispo. Están junto a la ciudad y lo cierto es que podemos considerarlas como unas termas naturales de lo más interesantes. Al parecer, las aguas termales que nutren a estas piscinas salen de un manantial a una temperatura superior a los 60º, no obstante, cuando llegan a las piscinas están a unos 40º. Dicen que las mismas son fantásticas para problemas de salud como la artrosis, el acné, la psoriasis o la dermatitis.
En el hermosísimo Valle del Jerte, Cáceres, podemos bañarnos en las espectaculares piscinas naturales de la conocida como Garganta de los Infiernos. Sí, con ese nombre no parecen muy apetecibles, pero lo cierto es que el paisaje que vamos a encontrar es arrebatadoramente bello. Se trata de una Reserva Natural en plena Sierra de Gredos, un lugar en el que podemos realizar numerosas rutas que cruzarán un sinfín de cascadas y pozas, aderezadas por la fauna y flora de esta parte de España. En total son unas 13 piscinas naturales que se conocen como pilones y que se han formado en las rocas por la erosión del agua.
Si vivimos en Cuenca o estamos cerca, siempre podemos optar por un clásico entre los clásicos, las conocidas Chorreras. Se trata de un lugar ubicado en el curso del río Cabriel hasta que se junta con el Guadazón. Una sucesión de piscinas naturales llenas de cascadas que parecen sacadas de un cuento de hadas. Agua de color esmeralda y rincones en los que disfrutar de un día único.
Finalmente nos desplazamos a Alicante, donde encontramos las Fuentes del Algar. Está bastante cerca de Benidorm y se ubica en una zona declarada Zona Húmeda Protegida. Se trata de un recorrido de un kilómetro y medio aproximadamente en el que nos sumergiremos en un fantástico mundo acuático lleno de belleza. Cascadas y manantiales que poco a poco han dado forma a estas rocas calizas, dando como resultado un lugar que parece de cuento.
Foto 1: Dagafe SQV