Los cementerios más bonitos de España
No es la primera vez que hablamos de necroturismo; y es que es una nueva modalidad de turismo que está teniendo muchísimo éxito, sobre todo en Europa, donde encontramos los camposantos más monumentales y con historia del mundo.
Coincidiendo con Halloween, queremos hacer una recopilación de los que, a nuestro parecer, podrían ser los cementerios más hermosos de España. Aunque no viajemos únicamente para verlos, siempre pueden ser una parada especial en nuestros viajes.
Comenzamos por Pontevedra, concretamente en Cambados. Es justamente aquí donde encontramos uno de los cementerios más bonitos y pintorescos del país, el conocido como cementerio de Santa Mariña de Dozo.
Este cementerio cuenta con un sinfín de tumbas repartidas como si se tratara de un puzle. Tumbas antiguas a base de piedra y símbolos religiosos. No obstante, el broche de oro de este lugar es ni más ni menos que las hermosas ruinas de un antiguo templo gótico del siglo XVI, algo que le da un toque de belleza extra a este cementerio.
El Cementerio de Derio, el conocido como Cementerio de Bilbao, es considerado también como otro camposanto monumental. En este lugar encontraremos esculturas de lo más llamativas como las que forman el Panteón de la familia Maiz o el mausoleo en recuerdo a las víctimas del Circo del Ensanche.
Cementerio de Derio – foto de Mario Martí
En La Coruña debemos pasar por Noia para conocer uno de los cementerios más bonitos de esta parte de España. Aquí, ante todo, destaca el edificio principal, la hermosa iglesia de Santa María de Noia. Este edificio se encuentra completamente rodeado por un cementerio, que al parecer, fue hecho con tierra traída desde Palestina. Entre las tumbas, encontramos algunas realmente antiguas, sepulcros medievales en los que no se leen nombres. En su defecto encontramos escritos los instrumentos de los oficios de las personas que allí se enterraban.
En Goiriz encontramos también otro camposanto digno de ser visitado. Se trata de un monumental cementerio de estilo neogótico. Podremos disfrutar de un tipo de cementerios muy del norte, con sus enormes pináculos que sobresalen por encima de los muros. No encontraremos pues tumbas tradicionales o panteones, pero lo cierto es que su aire tétrico es realmente hermoso.
En esta lista no podía faltar el Cementerio de Montjuic, un cementerio modernista ubicado en Barcelona. Aquí, entre otros, podremos maravillarnos con sus panteones pertenecientes a la alta burguesía de la ciudad del siglo XIX. No obstante, no es lo único que llama la atención del camposanto de Montjuic, pues además nos regala unas vistas espectaculares sobre la ciudad, ciudad que todo sea dicho merece la pena visitar durante esta época del año. Si estás pensando en viajar hasta aquí durante estos días podrás encontrar un sinfín de hoteles en Barcelona a buen precio.
Cementerio de Montjuic – foto de Enfo
En Córdoba podemos visitar el Cementerio de San Rafael de Monturque. Este lugar está incluido en la ruta europea de cementerios singulares, pues además de contar con mausoleos y panteones de gran belleza, bajo nuestros pies se encuentran las Cisternas Romanas, con más de 2.000 años de antigüedad.
Finalmente recomendamos la visita del cementerio de Burguete, construido en 1965 por el arquitecto Miguel Gortari Beiner.
Este cementerio también tiene una particularidad, pues su creador quiso que fuera el reflejo de la igualdad del ser humano frente a la muerte. Así, podemos observar como todo el camposanto está dividido en cuadrículas, cada una de ellas pertenece a una familia del pueblo. Aquí están prohibidos los panteones, en su lugar encontramos estelas discoidales, que son piedras circulares usadas en el rito mortuorio más antiguo de Navarra. La entrada a este cementerio se hace a través de una puerta en la que se puede ver la letra alfa, el principio de una nueva vida, asimismo, todo el perímetro forma la letra omega, o lo que es lo mismo, el fin de la vida terrenal.
Sin duda, cualquiera de estos lugares puede ser un broche perfecto para un viaje lleno de visitas e historias. Recordemos que en los cementerios, desde hace siglos, podemos encontrar algunas de las estatuas más impresionantes realizadas por escultores. Lugares tranquilos que nos recuerdan que estamos de paso, quizá tétricos para mucho, para otros un auténtico monumento a la mortalidad del hombre.