Qué ver en Cambados
Cuando visites Cambados te enamorarás de su casco histórico repleto de plazas monumentales y pazos majestuosos, de su sabor marinero, de sus bodegas de albariño, de sus puestas de sol y ¿por qué no? de su cementerio, uno de los más singulares de España y un imprescindible que ver en Cambados.
Esta villa señorial se encuentra situada en las famosas Rías Baixas gallegas, en la provincia de Pontevedra. Un lugar donde se fusiona un increíble paisaje de verdes viñedos con los azules profundos de la ría de Arousa. Una estampa que te hará brillar los ojos de emoción.
Acompáñame y te muestro los imprescindibles que ver en Cambados, la capital del albariño. ¿Nos vamos?
Qué ver en Cambados: imprescindibles
1- Conocer la plaza y el Pazo de Fefiñans, primer punto que ver en Cambados
El primer contacto con esta villa es bueno tenerlo en esta plaza, la de Fefiñans. Es considerada una de las plazas más bonitas de Galicia. En ella se encuentra la Torre del Homenaje y el pazo que le da nombre, construido en el siglo XVI y de un estilo que mezcla el Renacimiento con el Barroco gallego.
Originalmente la plaza estaba cerrada por cuatro arcos, de los cuales solo se conserva uno en pie, ya que los otros tres fueron derruidos en el siglo XIX para dejar paso a los carros que entraban en la plaza, lugar donde se celebraba el mercado.
2- Acercarte a la iglesia de San Bieito
En uno de los flancos de la plaza de Fefiñans se sitúa la iglesia de San Bieito (Benito). Levantada en tiempos románicos, cuenta con dos altos campanarios de estilo barroco.
Destacan en el exterior dos esculturas vestidas de guerreros con escudos y lanzas. Son conocidas como “los Balboas” y son los protectores de la iglesia y la plaza.
3- Pasear por la rúa Real
Cambados se disfruta perdiéndose por sus adoquinadas rúas en busca de su noble patrimonio y deteniéndose en alguna de sus animadas tabernas para saborear un rico albariño. No te olvides que estamos en su capital, y que en todos sus bares te servirán este vino blanco con DO (denominación de origen) Rías Baixas.
Su arteria principal es la rúa Real. En su entorno descubrirás bellos pazos como el de Bazán (hoy convertido en Parador Nacional) y el de Torrado e importantes casas señoriales como la Casa Museo Ramón Cabanillas.
4- Asomarte al Pazo de Ulloa, imprescindible que ver en Cambados
Dejamos atrás el barrio de Fefiñans y nos dirigimos a la antigua villa de Cambados, situada en la parte alta de la ciudad. Cuenta con numerosos pazos históricos. Uno de los más importantes es el de los Ulloa.
Allí han vivido a lo largo de los años distintos personajes importantes. En la familia de los Ulloa, perteneciente a la nobleza gallega, se inspiró Emilia Pardo Bazán para su novela Los Pazos de Ulloa, que fue llevada a TVE en una mítica serie con el mismo nombre.
En la actualidad el Pazo pertenece a una familia que lo alquila para eventos.
5- Descubrir las Ruinas de Santa Mariña Dozo, el cementerio más melancólico de España
A unos pocos metros del Pazo de los Ulloa se encuentran las Ruinas de Santa Mariña Dozo, uno de los imprescindibles que ver en Cambados.
Este camposanto de dramática belleza ha sido declarado el tercer monumento funerario más importante de España.
Sus torres semi derruidas, los arcos románicos, la nave central con las lápidas a ras del suelo y el cristo crucificado sirvieron a Alvaro Cunqueiro (escritor, periodista y gastrónomo gallego) para calificarlo como “el cementerio más melancólico de España”. ¡No te dejará indiferente!
6- Contemplar la puesta de sol desde la Torre de San Sadurniño
La Torre de San Sadurniño, situada en el barrio de Santo Tomé y bañada por las aguas de la ría de Arousa, es otro de los monumentos en ruinas que hay que ver en Cambados.
Fue construido durante los siglos VIII – IX d.C. y sirvió como baluarte defensivo contra los ataques de vikingos y de otros invasores. Hoy en día solo queda una parte de la vieja torre en pie.
Te recomiendo que si el día esta despejado, al atardecer te acerques hasta aquí para ver como el cielo se tiñe de rojos y anaranjados mientras el astro rey se esconde en el horizonte. Contemplarás una de las puestas de sol más emblemáticas de Galicia.
7- Hacer una cata de vino en alguna de las bodegas de Cambados, último punto qué ver en Cambados
En Cambados y sus alrededores podrás encontrar importantes bodegas de albariño, cuya uva procede de los viñedos de la zona, cosechada por generaciones de familias que han entregado su corazón al vino.
En la misma villa de Cambados, en la plaza de Fefiñans, se encuentran dos de las más antiguas bodegas de DO Rías Baixas: las bodegas Palacio de Fefiñans y la Bodega Gil Armada.
Otras bodegas cercanas son: Martín Codax, Granbazán, Condes de Albarei o Don Olegario.
Dónde comer en Cambados
En torno a la Plaza de As Rodas y a la Rúa Real se congregan el mayor número de tascas y restaurantes de Cambados. viene a ser la milla de oro del papeo cambadés. Estos son mis favoritos:
- A Fonte do Viño, (Plaza de as Rodas). Una encantadora taberna en la que los mariscos y pescados nunca fallan.
- A Casa de Miguel, (Rúa Real 14). Un lugar para un buen tapeo: pulpo a feira, zamburiñas y almejas a la marinera entre otras delicias gastronómicas.
- A Taberna do Trasno, (Rúa Principe 12). Cocina de fusión, con productos de mercado elaborados en horno de leña.
- Vago Viños (Plaza Asorey 3). En esta taberna la hamburguesa de vaca gallega se merece un aplauso.
- Yayo Daporta, (Rúa Hospital 7). Una cocina con una merecidísima Estrella Michelín en donde puedes optar por carta o menú degustación.
Dónde alojarte en Cambados
Cambados dispone de una gran oferta hotelera para todos los bolsillos. Esta es mi recomendación:
- Parador de Cambados. Puedes verlo y reservar aquí.
- Casa de Grande. Puedes verlo y reservar aquí.
- Casa Rosita. Puedes verlo y reservar aquí.
- Hotel O Lagar. Puedes verlo y reservar aquí.
- Casa Mariñeira Lourdes. Puedes verlo y reservar aquí.
- Hotel el Duende. Puedes verlo y reservar aquí.
Cambados es una oda a la piedra convertida en arte, al vino elaborado con amor, al buen comer y a un mar que te abre las puertas de par en par a sus encantos. ¡Date un salto a Cambados!
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