Sibiu, en el corazón de Transilvania
En Transilvania encontramos ciudades tan interesantes como Sibiu. No se trata de un lugar más, en absoluto. Se trata de un rincón lleno de historia y cultura. Un pedazo de la Transilvania profunda que ha mantenido intacta su esencia a lo largo de los años, mostrando todos sus legados al turismo con su mejor cara, la de sus agradables lugareños.
A lo largo de su historia, Sibiu contó con años grandes, muy grande. Por ejemplo, fue ensalzada como la capital del Principado de Transilvania, allá por 1692, llegando a ocupar este puesto hasta 1791. No obstante, su origen lo encontramos más atrás, aproximadamente en el siglo XII, cuando los colonos sajones la fundaron. En ese momento no se llamaba Sibiu, se referían a ella como Hermannstadt.
Quizá su origen sea la principal razón por la que un turista en Sibiu tiene la sensación de estar visitando un pueblo germánico; y es que la arquitectura ha recibido una fuerte influencia de este pueblo. Aunque todo sea dicho, no es lo único, pues desde su gastronomía hasta sus tradiciones están fuertemente influenciadas por los germanos.
Si hablamos de su extenso patrimonio, es imposible no caer en la cuenta de que esta ciudad fue capital cultural Europea en 2007; y es que, por ejemplo, su Casco Antiguo atesora toda la grandiosidad de una época en la que el comercio de la región era muy poderoso. Pudiendo así observar edificios señoriales de una belleza desbordante.
Este pueblo paso muchísimos años, siglos incluso, rodeado de unas grandes murallas. Su interior estaba resguardado por muros de gran tamaño, fortificaciones defensivas, 39 torres, cinco baluartes y cuatro puertas. Una fortaleza inexpugnable que resistía estoicamente ante cualquier tipo de ataque.
Entre los lugares más destacados de la ciudad, que ya de por sí es encantadora, encontramos la Piata Mare. Es la plaza más grande de la ciudad y pasear por ella implica deleitarse con la arquitectura que la rodea, disfrutando de un buen café en sus terrazas o jugando con la fuente de chorros que se ubica en el centro de la misma. Asimismo, esta plaza fue designada como monumento arquitectónico por la Unesco, y cuenta con algunos de los edificios más importantes de la ciudad.
Si queremos visitar un museo interesante podemos optar por el Museo de arte Samuel Bruckenthal, en el cual encontraremos obras de artistas tan destacados como Boticelli, Tiziano, Rubens o Jan Van Dyck. No obstante, para museo interesante y delicioso, hay que desplazarse un poco del centro de la ciudad. Debemos dirigirnos al Museo Etnográfico de Sibiu, que es el museo etnográfico al aire libre más grande de Europa.
El Astra, que así se llama, cuenta con unas 96 hectáreas en las que se exponen más de 340 edificios tradicionales de toda Transilvania. Podemos ver iglesias, casas de pescadores, molinos de viento y agua y un sinfín de edificios más, que recrean una bellísima aldea de grandes dimensiones que no podremos parar de fotografiar.
No podemos perdernos tampoco algunos de los templos más importantes de la ciudad. Así, destacamos, entre otros, la hermosísima Iglesia Jesuita de Sibiu o la Catedral Evangélica, actualmente en un arduo proceso de restauración.
Si bien es cierto que existen muchos más lugares interesantes, lo importante en Sibiu es andar por sus calles. Perdernos entre sus callejones sin intentar descubrir en que parte de la ciudad apareceremos. Sin miedo, pues se trata de una ciudad muy segura, con un bajo índice de criminalidad.
Entre toda su oferta hotelera, que es amplia, queremos destacar dos hoteles muy interesantes. Por un lado tenemos el Hotel Levoslav House. Este espectacular establecimiento de 4 estrellas está situado a muy pocos pasos de la plaza mayor de la ciudad. Así, su ubicación será perfecta para movernos por el casco antiguo.
El hotel se ubica en un edificio de 1840. Sus instalaciones fueron actualizadas por completo en 2008 y cuenta con habitaciones muy amplias dotadas de acceso a internet, aire acondicionado, caja de seguridad, calefacción central, moqueta, minibar o secador, entre otros.
También destacamos el Hotel Imparatul Rominalor. Se trata de un establecimiento de 3 estrellas ubicado en el centro de la ciuad, a muy pocos pasos de tiendas y comercios.
Está ubicado en un edificio del siglo XVII. Completamente restaurado, cuenta con 93 lujosas habitaciones decoradas con excelente gusto. Están equipadas con baño completo, calefacción central, minibar, nevera y tv, entre otros. Asimismo, el hotel cuenta con aparcamiento, bar, gimnasio, servicio de masajes y sauna, entre muchos otros.
Otros enlaces de interés:
Foto vía: Pedro Vizcaina