Qué comer en Mallorca
Mallorca es uno de los destinos turísticos más importantes de España. No sólo entre los españoles, a nivel internacional, Mallorca es un lugar que enamora muchísimo. No es de extrañar, teniendo en cuenta la calidad de sus playas y su extenso patrimonio; además, no podemos olvidarnos de su rica gastronomía. Hoy os mostramos los platos más típicos de Mallorca.
¿Qué comer en Mallorca? Platos típicos
Podemos empezar nuestra lista de qué comer en Mallorca por el frito mallorquín, que es, sin duda, uno de los platos más apreciados por los mallorquines. También es una de las recetas con más historias; y es que data del siglo XIV.
El frito mallorquín puede elaborarse con diferentes verduras dependiendo de la estación del año. El tradicional será con carne de cerdo o cordero, aunque acepta variantes con pescado o sólo verdura. Así, el más clásico estaría elaborado con carne magra, hígado, patatas, pimientos rojos, cebolletas, hinojo, guisantes, ajos, sal y aceite de oliva.
El Tumbet es otro de esos platos que hay que comer en Mallorca. Es una receta vegetariana que se elabora con verduras de la zona. Se trata de un sofrito de berenjena y patata colocada en una cazuela de barro. A estas verduras se les añade una salsa de tomate, aceite, ajo y sal.
No podemos olvidarnos de comer en Mallorca la tradicional sobrasada mallorquina. Este embutido curado se prepara a partir de varias carnes de cerdo condimentadas con pimienta negra, pimentón y sal. Lo bueno de la sobrasada es que se pude tomar con diferentes platos, como tostadas, biscotes, bocadillo o incluso en guisos con arroz. Es también muy común comerla aderezada con miel.
La coca de Trampó, también consumida en Cataluña y la Comunidad Valenciana, es una coca muy popular que se condimenta con diferentes tipos de fiambres, atún e incluso con verdura y queso.
La coca en sí se hace con harina, huevo, agua, aceite, mantequilla y sal. En la tradicional mallorquina se añade pimientos rojos, pimientos verdes italianos, tomates, cebolla, pimentón, aceite de oliva y sal. Es muy típico verla en las panaderías de la ciudad, pero también en diferentes menús. Además, suele ser una merienda bastante popular en la isla.
No es que sea la receta más elaborada del mundo, pero el pa amb oli es sagrado en la isla, y por tanto otro de los platos que debes comer en Mallorca. Es muy similar al pa amb tomaca catalán, sólo que en este caso se utiliza el famoso pan payés, que se puede tostar. Se añade ajo restregado y se unta con tomates maduros de ramillete, muy típicos de la tierra. Después se añade aceite y un poco de sal. También se le puede añadir jamón serrano, queso mahonés, embutido, camaiot, hinojo marino y aceitunas.
Como plato principal podemos encontrarnos con el arroz brut. Es uno de los platos más apreciados de la gastronomía mallorquina. Un arroz caldoso y especiado que se cocina con los productos de la huerta y con carne diversa.
Los ingredientes pueden variar dependiendo de la temporada, aunque podemos hablar del arroz brut de matanza. El nombre viene por el caldo turbio y oscuro que crean las especias con las que se condimenta, tales como canela, azafrán, pimienta y pimentón. Además, se le añade picada de hígado de pollo o conejo al final de la cocción. Sin duda, otro plato típico que debes comer en Mallorca.
No podemos despedirnos sin hablar de la famosa ensaimada mallorquina. Es uno de los dulces más famosos no sólo de la isla, también de toda la geografía española. Estos dulces se elaboran a partir de agua, azúcar, huevos y manteca, entre otros. Es un producto muy tradicional, aunque lejos de lo que imaginamos, la ensaimada mallorquina más clásica no lleva relleno. También es más mítica la que está rellena de cabello de ángel, aunque actualmente se puede encontrar con diferentes rellenos, como nata, crema, crema quemada, chocolate o tallades (con sobrasada).
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